04 de Noviembre de 2025
El HCD designó dos calles en memoria de “Nelly Dorronzoro” y “Chela Sosa”
El HCD entregó las Ordenanzas de nombramiento de las calles en el barrio San Juan de Dios en el marco de la sesión ordinaria Nº 18. En el recinto estuvieron el hijo de Chela Sosa -Javier Mignone- y la sobrina de Nelly -María Ignacia Dorronzoro-.
También, se hicieron presentes integrantes de la Comisión de Nomenclatura Urbana, el Rector de Universidad -Walter Panessi-y el Decano del Departamento de Sociales -Miguel Núñez-.
La solicitud de nombramiento llegó al Concejo Deliberante por pedido de la Universidad Nacional de Luján, mediante la “Comisión Institucional para la Preservación de la Memoria”, y cuya Resolución fue aprobada por el Consejo Superior de la Casa de Altos Estudios.
La calle 236 bis llevará el nombre de “Nelly Dorronzoro”, y la calle 223 bis el nombre de “Angélica Chela Sosa”.
La norma destaca que Angélica Paula “Chela” Sosa, nacida en 1925, fue docente, militante y defensora de los Derechos Humanos, integrando la Línea Fundadora de Madres de Plaza de Mayo y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS)”.
El 14 de mayo de 1976, su hija Mónica María Candelaria Mignone fue secuestrada de su domicilio por la dictadura cívico-militar instaurada en 1976, permaneciendo desde entonces desaparecida, hecho que marcó para siempre la vida de Angélica Paula Sosa y la impulsó a convertirse en una voz potente en la lucha por la Memoria, la Verdad y la Justicia.
También señala que, Nélida Adela Dorronzoro, nacida el 28 de agosto de 1922, se desempeñó como profesora de Lengua y Literatura en instituciones educativas de Luján y como formadora de docentes en el Instituto de Profesorado de Mercedes, aportando a la formación de generaciones de estudiantes y docentes.
En 1976 sufrió la desaparición forzada de su compañero de vida, Dardo Dorronzoro, herrero y poeta, hecho que marcó profundamente su historia y la llevó a emprender una búsqueda incansable que se transformó en una lucha sostenida por los Derechos Humanos.
La designación de las calles con sus nombres se hizo con “el fin de rendir homenaje y preservar la memoria de dos mujeres que forman parte del acervo histórico y social de nuestra comunidad por su lucha en defensa de los Derechos Humanos”.
